domingo, 1 de septiembre de 2013

Es que no me dijeron...


Para los que estamos en cuarto año de la carrera de medicina, solo en unos meses te convertirás en Médico Interno de Pregrado, el paso previo a tu servicio social.
Y justamente estos últimos meses muchos de mis nuevos compañeros han empezado a preocuparse por que será de ellos.

Durante los primeros 2 años en la facultad tienes clases teóricas, nunca vez pacientes, y todo el mundo está deseoso de entrar en los ciclos clínicos y ver pacientes reales; por ello la gran mayoría (en la que no me incluyo) aprende solo lo necesario para pasar estos años que catalogan como aburrido y cansado, su único deseo es pasarlos y llegar a la clínica.
Empiezas 3er año y por fin lo tienes, tu experiencia clínica, todo aquellos que esperaban este momento se vuelven inmensamente felices, dicen que la clínica lo es todo y miran con malos ojos si les recuerdas que las ciencas básicas siguen existiendo, peor aún si les mencionas una materia llamada Salud Pública.
Transcurren así casi 2 años, y llega el momento de ir pensando en donde realizarás tu servcio social.
La tradición indica que debes realizarlo en un sitio alejado de tu casa, enmedio de la jungla o el desierto, o mejor aún, en algun poblado de los tantos cerros que posee la orografía mexicana, en un "centro de salud" que tiene una silla, una mesita y una camilla, ahhh y paracetamol, kilos y kilos de paracetamol. Con este armamento debes atender todo tipo de padecimientos en la población a la que te envien. Serás privilegiado (o desafortunado) si cuentas con una enfermera que te auxilie eventualmente.

Pero los tiempos cambian, y hoy en día México se encuentra inmerso en un ambiente poco favorable para el desarrollo de la práctica médica en sitios poco urbanizados, bueno prácticamente de muchas profesiones. ¿La razón? La inseguridad.
Comienzan a poner en las noticias breves historias de médicos que son asesinados, extorsionados o violadas durante su servicio social, algo que pudiera parecer nuevo, pero que hasta parece formar parte de la "tradición", no por nada la facultad cuenta con un muro (de dimensiones considerables) donde se coloca el nombre de los que han muerto durante su servicio social.

Estas y otras razones han sido motivo para que esas mismas personas que se declaraban médicos clínicos, entregados en cuerpo y alma a sus pacientes, comienzen a reconsiderar el seguir "la tradición" del servicio social, y optar por otras opciones como lo son la investigación y la docencia.

Es aquí donde entra la frase y título de esta entrada, que ha sido pronunciada por muchos de estos estudiantes que comienzan a visualizar las cosas fríamente.

Resulta muy gracioso ver como de la nada, ahora todos se preocupan por intentar hacer algo de curriculum y hacer todo lo necesario para realizar servicio social en investigación, teniendo 5 años para hacerlo tranquilamente y ahora quieren hacerlo todo en unos escasos meses., comenzado a volverse común oir sus quejas como:
  1. "Es que no me dijeron que se podía hacer el servicio como ayudante de profesor"
  2. "Es que nunca te dicen que es importante hacer investigación"
  3. "Deberían decirnos que tomaramos cursos extra desde el inicio de la carrera"
  4. "Los investigadores son muy payasos, quieren que uno se acuerde de todas las ciencas básicas"

A lo que se podría responder:
  1. Tal vez no te enteraste porque nunca te acercaste a tus profesores, solo los veías como alguien a quien tenias que oir durante clases, como esos seres que no son "tan clínicos" como tu quisieras, y por ende ignorabas olímpicamente.
  2. Mentira total. Desde el primer día te dicen que hay todo un departamento especial para vincularte con investigadores; hay miles de eventos, congresos, seminarios en la facultad e incluso hasta en algunos hospitales; es más, el día que te inscribes siempre hay un comité encargado de informarte que puedes y DEBES hacer investigación, incluso te invitan a formar parte de grupos especiales para fomentar y fortalecer tu parte científica, mismos grupos que el resto de la carrera te la pasas criticando y diciendo que son elitistas, aunque nunca les hayas hablado a un miembro de ese grupo ni asistido a sus clases, eres capaz de criticarlos y decirles que son muy faroles (que fingen saber mucho, pero no saben nada) y según tu, nunca serán buenos clínicos como tú.
  3. Te casaste con la vieja idea de "El paciente es el mejor libro" y prefieres pasartela viendo gente enferma, oir y creer lo que te dicen los demás; en lugar de asistir a un curso formal donde lo que te dicen tiene respaldo científico y no solo el clásico "En mi experiencia..."
  4. Si planeas hacer investigación, obvio debes tener un poquito de conocimientos necesarios; no es que los investigadores sean payasos, más bien solo te hacen ver la falta de conocimientos o habilidades que deberías tener y preferiste desechar para dar cabida a tu "amplia sabiduría manual" en ámbitos clínicos. Simplemente es como si un investigador quisiera explorar el abdomen de un paciente, lo más seguro es que la falta de práctica puede impedir que lo haga correctamente, y no faltará el "sabio clínico" que se burle; justamente pasa eso cuando tu gran clínicos quieras realizar una PCR, no tendrías ni la más remota idea de que hacer.


En fin, seguiré informando de estos episodios cotidianos...